sábado, 19 de agosto de 2017

Alfonso Azpiri. In memoriam


   Ayer falleció uno de los grandes del comic patrio, con un estilo propio que impregnó no solo las viñetas, sino la historia del videojuego español desde sus inicios y todo el rango de ilustración, desde la erótica hasta la dedicada al cine, pasando por la dedicada a la aventura o la ciencia ficción.
Todo autor de laudatio presume de haber sido amigo de quien nos dejó. Yo no tengo ese honor, y no por falta de ganas, sino de encuentros suficientes. Nos conocíamos, nos apreciábamos y quiero creer que, de no haber mediado un Luxemburgo de distancia, se nos podría haber calificado de amigos. Pero nada detiene el tiempo, y esta vez nos pilló sin unas cuantas conversaciones, sin unas cuantas cervezas, sin un puñado de disensiones.
Pero bastaba con conocer un poco a Alfonso, por poco que fuera, para caer rendido ante su mezcla unica de genio, ingenio, encanto y esa galantería tan ochentera que siempre llevó a gala.
Nunca logré pillar a Alfonso descuidado: ni en el exterior ni en el interior, y echaré de menos su genio, su elegancia, su voz y ese carisma que lograba trasladar al mínimo boceto que trazaba.

Buen viaje, Maestro. Tu gente y tus creaciones no te olvidaremos