miércoles, 17 de diciembre de 2014

Constructions





I
build
whatever shape
my everdoubting soul
will be forcing me to dream
in the twilight nights
when your memory
lets me rest
(finally)
from
U




Leaks and sounds





Drop




drop





drop






drop





drop


...



SOIL

lunes, 8 de diciembre de 2014

En 9 dias Fausto, también de Murnau



"Remember me", con Michael Palin

Muy buena, esta miniserie de 3 episodios. Suave suspense que sin necesidad de exceso alguno lleva de principio a fin la duracion justa de la trama y deja con agridulce sabor de boca. ¿Qué mas se puede pedir?

El encanto de los gabinetes de curiosidades (los Wunderkammer)





(parcial de la casa de André Breton)

(Sandman núm. 1, portada, de Dave McKean)

Cabinet de curiosités, Wunderkammer, gabinete de maravillas... En parte por el afan de poseer, en parte por la necesidad humana de aprehender aquello que no llegamos a comprender, el ser humano ha tendido siempre a reunir aquello que le despertaba curiosidad: sea el fosil de un erizo, el caparazón de una toruga, el cuerno del unicornio o la plasmación física de la creencia. Y si ademas ello evidenciaba sapiencia, vivencia o aventuras, el marchamo de la permanencia quedaba a fuego en la memoria del detentador.

Con ambos propósitos en la mente se ha venido creando, desde el amanecer mismo de la historia, una suerte de género decorativo, rayano en lo lúgubre y con todo el atractivo que las zonas grises tienen para el hombre: el de los gabinetes de curiosidades. Comenzando en los mismos principios de la historia, el gusto por estas colecciones aglutinadoras de signos de trascendencia -antaño solo privilegio de reyes y prelados-, fue contagiándose en el siglo XIX a una burguesía ansiosa de disfrutar al fin de todo lo que ahora podía alcanzar, y con la llegada del historicismo, el romanticismo y el encanto por los viajes lejanos, los antiguos gabinetes (antaño centrados en obras de arte, especies animales y objetos religiosos) dieron un giro hacia todo lo proveniente de de los parajes más lejanos: desde armaduras de samurai hasta sishas con efluvios a Loti, pasando por bolas de Cantón en marfil, cabezas reducidas por los jíbaros, kukhris nepalíes o máscaras africanas. Y así, los gabinetes de curiosidades fueron evolucionando hasta convertirse en pequeñas islas donde el deseo de trascendencia, de rasgar el manto de lo físico, se escondía tras cada retazo físico de uno y mil mundos: en antigüedad, distancia y dioses.

Islas que la sociedad de la informacion, las comunicaciones y los medios de transporte han venido arraigando en el subconsciente de cada uno de nosotros, hasta el punto de que en toda creación moderna, en toda concepción artística, subyace en el fondo, total o parcialmente, un gabinete de curiosidades: desde el hogar de André Breton hasta los sueños de Dave McKean, pasando por las tiendas de Candem town, las puestas en escena del nuevo teatro o las películas de suspense psicólogico.

Todo puede encontrarse en el gabinete de curiosidades de nuestro subconsciente: tan aglutinado como confuso respecto al qué vendrá cuando caiga el telón. Y si cada uno de nosotros tiene un palacio de la memoria donde recordar y un jardín secreto donde ocultarse, ninguna de dichos lugares íntimos supera en importancia al lugar donde acumulamos todo aquello que no comprendemos, y todo aquello que no queremos ni comprender, ni afrontar.


"Ruegan una sonrisa por su alma"

Ante la grandeza, los comentarios huelgan

domingo, 7 de diciembre de 2014

Tabu (o Tabou), de Murnau (cine concierto en la Cinemateca deLuxemburgo)

Dos líneas, que tengo prisa por cerrar un asunto (curiosamente jurídico, y el puñetero se me resiste). Ayer me acerqué a ver esta bella película, nada típica de la línea de Murnau, y fue una agradable experiencia. A nivel musical, el duo que tocaba en vivo (Zone libre, formado por Serge Teyssot-Gay y Cyril Bilbeaud)era bueno, y a nivel visual, Tabu es el capricho de un cineasta al que en el climax de su carrera (y al final de su vida: murió el año siguiente) le apetecía hacer algo que fuera a) exótico, y b) estéticamente bello.

Puntos positivos: se nota a la legua que está hecha con el minucioso cariño de quien ha adquirido influencia, nombre y dinero como para no tener prisa. Puntos curiosos: se notan, tambien a la legua, las predilecciones del director en más de un campo.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Grandes frikis de la Historia (2): Felipe II, el coleccionista de huesos




En su reino no se ponía el sol. Y en su Escorial no cabían las reliquias. El monarca más poderoso territorialmente de la Historia, el que introdujo en España la fabricación artesanal de la cerveza y prohibió que se utilizaran para su fabricación otros productos que no fueran trigo, cebada y lúpulo, el gotoso que gustaba de la caza, la olla podrida bien cargada y las mollejas, no paraba de atesorar las reliquias más diversas de las partes más dispares de los santos más variados; hasta el punto de que las crónicas dicen que todas las semanas dedicaba un tiempo de sus audiencias para recibir a los mercaderes de las reliquias más disparatadas. Se dice que en su posesión se hallaban trozos de la Vera Cruz como para construir un barco, varios craneos de un mismo santo y huesos como para suministrar a varias facultades de medicina. Y si a eso le unimos su vena acaparadora de cuadros del Bosco (que adornaban sus estancias como las de Goya las pinturas negras), su vena alquímica (construyó una Torre de Botica donde se experimentaba con todo) y las manías con los perros negros, creo que su espacio en el Panteón friki está más que ganado.

Grandes frikis de la Historia (1): Godoy, el golfete





Con esta entrada, inauguro la sección de frikis famosos, para demostrar que frikis los ha habido siempre: y ninguno de ellos tonto, fracasado o apartado por sus semejantes (hala).

Y la inauguro con el Príncipe de la Paz, el one and only Don Manuel Francisco Domingo de Godoy (di Bassano) y Álvarez de Faria, de los Ríos y Sánchez-Zarzos. Uséase Godoy, el valido de Carlos IV, el presunto amante de la "reina lasciva", Doña Maria Luisa de Parma, que llegó a lo más alto bajo quien no supo gestionar la revolución francesa, para al final acabar como acabó.

Dejando aparte el cómo llegó a valido, si por cualidades o por encantos, lo cierto es que este señor que tanto poder logró acumular desde tan joven, además de espabilado y con vista tenía un montón de gustos diversos, todos ellos caros. Comiloncete, presumido y coleccionista (cualidades frikis evidentes en el retrato que le hace Goya), disfrutaba su soledad (y su no soledad) en su gabinete reservado de curiosidades, el cual estaba coronado en sus paredes por la maja desnuda de Goya, la Venus del espejo de Velázquez y otras dos más, éstas atribuidas a Tiziano.

Imagínense el sitio, lleno de objetos provenientes de lugares remotos, joyas, armas labradas y juegos diversos; exquisito -y exclusivo- mobiliario de las maderas más nobles, chez longues de usos versátiles y, en las paredes, dos de los cuadros más bellos de la Historia del Arte: como quien no quiere la cosa.

Huelga decir que con -y en- un sitio así, cualquiera no liga.

Gracias, señor Godoy, por tantas cosas tan simpáticas, y por el relato de una vida que habrá podido ser todo, menos aburrida.

Es lo que tienen los validos: cabrones, sí, pero cabrones listos.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

L'inhumaine, de Marcel L'Herbier (1924)




Ideada desde el principio para mayor gloria de su protagonista femenina, la diva Georgette Leblanc, con escenario de Pierre Mac Orlan (lo que es el mundo: el autor de "el canto de la tripulación", obra cuyo título los García-Alix usarían para su gran revista) y sobre idea original de Marcel L'Herbier, es de notar que los decorados de, entre otros, Fernand Léger dieron la inmortalidad a una perla del cine mudo que no está suficientemente valorada en detrimento de las típicas Metrópolis, She, Caligary o similares. L'inhumaine es la amalgama perfecta de historia, puestas en escena, vestuarios y efectos diversos, hasta el punto de que su visionado, con la música adecuada, se convierte en una experiencia que no precisa de intelecto: sólo de ojos y oídos.

Una joya.

martes, 25 de noviembre de 2014

La isla mínima, de Alberto Rodriguez

Película ésta que, como los malos toreros, comienza muy bien, se desarrolla con una congruencia intachable pero, al final, se desinfla y acaba desastrosamente la faena. Eso, si la acaba de algun modo.

Dejando aparte que solo es original para quienes no hayan visto True Detective (la idea es clavaíta, hasta lo de las marismas Bayou/Doñana y la parejita ochentera), parece como si el guionista se hubiera empapado de la citada serie americana, pero hubiera descuidado revisitar perlas del suspense policial como sospechosos habituales, de final magistralmente rematado. Porque... ¿qué pasa con el viejo depravado?, ¿quién dirigía la red de explotación de menores? porque si me he enterado bien, el único que muere es el mandado, ¿no?

¿Y qué ocurre con tanto personaje bien desarrollado pero que al final se queda en nada? ese padre más oscuro que Darth Vader, esa adivinadora... y, especialmente, ese barbitas furtivo pseudo Jarjar Binks, que al final solo se queda para resolver papelas al guionista y entregar un tupper de cangrejos. Pena de guión, con lo bien que podían haber utilizado al citado barbas para dejar un final redondo, haciendo que algun detalle de la foto -o el contenido mismo del tupper que les da- desvelara que el verdadero cerebro de la trama era él...

Pero no. Usease: la primera mitad no demasiado original, pero bien llevada, y la segunda mitad -sobre todo el final-... han olvidado terminarla.

Pena de oportunidad perdida.

lunes, 24 de noviembre de 2014

La cúpula de la rosa de sangre

La rosa nunca supo lo que era. Solo era consciente, desde su razón sin razón, de que la gente la miraba, sonreía y seguía los silenciosos acordes de un ritmo y una belleza que ella misma nunca sería capaz de oler. No podía oler, pero sí podía moverse al ritmo del suave viento que la acunaba, con la esperanza de llevar su mensaje y su semilla aquellos lugares donde no existía la belleza con que ella nació.

La rosa nunca tuvo un espejo, y la carencia de sistema nervioso la impedía comprender todo lo que ella, sin querer, provocaba. Solo sabía que aquellos órganos por los que los animales de dos patas comían se arqueaban, enseñando las perlas con las que desgarraban el alimento. Solo que en aquellos momentos, esas perlas no servían para destrozar, sino para crear una belleza que, pareja con la rosa misma, se hacía una para ser esparcida al viento, haciéndose herramienta de felicidad o, cuando menos, de coyuntural solaz. De esas que alivian las vidas o, al menos, llegan a hacer repensar el acabar con ellas.

La rosa vivía ajena a todo ello. Pensaba que había existido siempre, en ese solar abandonado que antes fue un salón de baile y ahora, por mor de la crisis que asolaba toda la Francia decimonónica, se había convertido en un vertedero aislado.

Un día, el mismo viento que llevaba su ignorado mensaje le quiso hacer un regalo, e hizo que una de las rosas artificiales que antes habían adornado las guirnaldas de aquel sitio de celebraciones cayera a su lado. Y la rosa vio a un igual, y se enamoró.

Nuestra rosa intentó comunicarse con aquel remedo de vida que la voluntariosa brisa le había hecho llegar; hacerle reaccionar, incluso tocando los artificiales pétalos con los suyos cada vez que el viento arreciaba, pero la rosa de plástico no respondía. Nunca respondió. Tampoco se elevaba con la lluvia que a ella le hacía tanto bien, ni hacía que la gente sonriera, com sonreían con ella. Por lo que la rosa que era pensó que su amor había muerto también, y se dejó morir.

Pero la belleza solo muere cuando deja de ser. Y solo deja de ser cuando es sustituida por vacío, o por maldad.

La muerte no acaba con ninguna belleza.

Por eso la rosa, aunque murió, no dejó de ser bella. Cuando se secó, su rojo intenso fue transmutándose hasta convertirse en un negro rojizo que cambiaba de color con cada hora, con cada caprichoso movimiento del sol, con cada baile de nubes, con cada reflejo del rocío que desmmadejaba la luz en mil tonos de arcoiris. Y sus colores eran tan intensos que un día un arquitecto enamorado se postró ante la rosa, cogió el único pétalo que de ella había caído al suelo -la única lágrima que ésta vertió al morir- y sintetizó una pequeñísima cantidad de un rojo que, décadas después, regalaría a un prometedor pintor malagueño, con el juramento de que éste solo lo usaría para un cuadro que perviviría en la historia del mundo. Cuadro que fue pintado, sin saberlo su autor, inspirado por el olor de la belleza de esa rosa que, ya eterna, quedaría por siempre en una pequeña catacumba, justo debajo del corazón de uno de los monumentos más conocidos del mundo.

La gran torre de metal fue erigida por Gustave Eiffel con el solo fin de proteger la rosa y, a la vez, hacer que su olor llegara a las nubes como un gran amplificador que, punzando el cielo, hiciera que Dios sonriese sobre todas las almas que postreiormente caerían en todas las guerras.

El único ejemplo de ese rojo único fue el que utilizaría Picasso mucho después para hacer la mancha de sangre del soldado caído de su Guernica. Solo que esa mancha desapareció. Pero su belleza e intensidad no han desaparecido: ni de la memoria de los pocos hombres que llegaron a verla, ni del corazón del mundo.

lunes, 3 de noviembre de 2014

La sabiduría es saber cuando irse

(Salvo que alguien lo haya dicho antes, lo digo yo)

jueves, 23 de octubre de 2014

Un pedazo de Historia




Por azar buscado ha llegado a mi posesión un curioso objeto a añadir a mi gabinete de curiosidades, toujours en progres. Se trata de un esqueleto / fósil de erizo firmado por un buen número de los asistentes a las conocidas tertulias de la cacharrería del Ateneo de Madrid en la década del los no tan felices años 20-30. A falta de un examen mas en profundidad, aparecen las firmas de Valle-Inclan, el presidente que nunca fue socio; Manuel Azaña, su valedor; el presidente Don Niceto Alcalá-Zamora y otros notables de cultura y política como Salazar Alonso o Alejandro Lerroux. Tanto tintas como firmas (eso sí, teniendo en cuenta lo abigarrado de su necesaria confección y la jovialidad del momento, plasamada en dibujitos y guiños gramaticales) parecen reales, y en todo caso constituyen una muestra todavía viva de ese ambiente, ecléctico y bohemio, que se perdió en julio de 1936, tan plasmado en su heterodoxia por Sánchez Portela.


Perdimos mucho, y por h o por b nunca lo hemos recuperado. En fin, dejo volar mi imaginacion y me imagino a alguno de los miembros de ese Ateneo trayendo el trofeo, recuerdo de alguna excursión, y pidiendo a los tertulianos que lo firmaran. O un pacto en algún refugio tras una caminata por sierras antaño oceanos, o una promesa misteriosa...

domingo, 19 de octubre de 2014

Cosas que pasan



El precio de olvidar la Historia

Tendemos a olvidar la Historia, y no nos damos cuenta de que efectivamente el precio a pagar es repetir sus peores capitulos. Hay una historia puta (la que solo se acuesta con los vencedores), una puta historia (la de los vencidos) y muchas otras, con distintos calificativos igualmente protervos. Pero tambien hay una Historia maestra, que tendemos a olvidar con consecuencias nefastas: en este caso, las que derivan de ignorar el respeto por las convicciones más intimas de quienes nos rodean.

El ejercito britanico introdujo, allá por 1857, un nuevo fusil cuyos cartuchos, recubiertos de papel que se arrancaba de un mordisco, fueron envueltos con una grasa especial.

Hasta aquí, todo correcto.

El problema es que entre los cipayos -soldados indios al servicio de la Compañía de las Indias Orientales-, se corrió el rumor de que esa grasa era de cerdo o vaca, animales sagrados para musulmanes e hindus, respectivamente.

De ahí a la negativa generalizada a usar los nuevos cartuchos transcurrió un tiempo minimo, y de dicha negativa al llamado motin de los cipayos de 1857, todo fue uno. Tal "motin" casi acaba con el imperio britanico en la India, y constituye aun hoy un capitulo negro en la historia de la antigua colonia.

Hoy se profanan por igual tumbas de judíos, iglesias cristianas en paises arabes y ayunos musulmanes a lo largo de todo el orbe, pensando que todo es aceptable, que nada pasa.

O sí.

viernes, 17 de octubre de 2014

Elementos indispensables del hogar típico luxemburgués

De fuera adentro, y descartando el megadescapotable con neumáticos de invierno, del cual hablaremos en otra ocasión:

- Pegata amarilla en el buzón de correos, de los ecologistas de aquí. El texto: "Keng Reklammen w.e.g", con un elefatito raro que solo Dios sabe el por qué.

- Cubos de basura (negro,marrón, azul o amarillo, según los desechos), y la inefable bolsa para bricks, latas, envases de plástico tipo suavizante/lavavajillas.... Cuentan al respecto las crónicas que hubo alguien que no se equivocó. Yo cometí el pecado de meter un trozo de corcho blanco y ahí que me dejaron el bolsaco, con una vergonzante pegatina tan grande como roja bien adherida, en la que se me venía a llamar retrasado. Para días de recogida de cada tipo de desecho, consultar códigos postales.

- Perchas de abrigos con distintos packs GPF (Guantes, Paraguas y Foulard, indispensables de octubre a marzo.

- Algun "objeto de arte limitado" comprado en alguna de las maravillosas "inmobiliarias-galerías de arte". Este negocio mixtísismo solo lo he visto por aquí. Lo que a veces se expone... tambien (a Dios gracias).

- Ultimamente toca tener un elefante policromado de la Elephant Parade puesto en algún sitio de la casa. Cuanto más grande, más bonito. Lo mismo se aplica a los jarrones de Longwy.

- Cubertería, vajilla (salvo los cuchillos de carne, que suelen ser Laguiole) y adornos de Navidad de Villeroy & Boch. A hacer patria

- Las indispensables lamparitas de noche puestas en las ventanas, para posibilitar ver el interior y, a la vez, imposibilitar ventilar el susodicho espacio interno

- Superequipazo Hi-fi de música. Normalmente ampli de válvulas, tocadiscos modernísimo y altavoces sin calificativos.

- A nivel de decoración fina, algo de pâte de verre (pasta de vidrio, vamos). Si es Gallé, mejor. Si no, aceptamos Daum u otro que sea, eso sí, de la escuela de Nancy.

... Y así podría seguir, pero me toca ir al Auchan a hacer la compra de la semana (acontencimiento del día: decidir si hoy ceno carne o pescado. Tal stress está acabando conmigo).

Cómo dar el toque luxemburgués a los platos

Es lo que tiene la globalización y, sobre todo, el dinero a espuertas. Entonces es facilísimo, señores. Examinaremos dos ejemplos y verán cuan fácil es aprender esta dimensión culinaria

A) Luxemburguizacion de la italianísima pasta

Hala, un trufote entero laminado por encima y... yatá


B) Con la carne, lo mismo, pero esta vez con un peazote foie encima, de láminas nada. Cuanto más foie, más luxemburguizao, mire Ud

sábado, 11 de octubre de 2014

¿Los enemigos de Dios?

Si Dios viviera hoy, quizás fuese poeta

jueves, 9 de octubre de 2014

Hizo ya un año

Cómo pasa el tiempo, Antonio.

Un año ya sin que estés aquí, y no se te echa de menos: por la sencilla razón de que nunca hemos dejado de pensar en tí,
por lo que todavía no te hemos dejado que nos dejaras.

(Lo siento, somos así de egoistas)

Cómo pasa el tiempo, amigo,

Y el trabajo de tu vida sigue tan fresco como el pan recién horneado,

sin envejecer.

Cómo pasa el tiempo, Maestro,

y ni una línea de tu sonrisa se nos ha olvidado.

Por eso, sigues aquí,

y nunca te vas.

solipsismo, genio maligno y el tiempo en la mosca de la fruta

Miramos al cielo, y nos planteamos qué Dios nos puede estar mirando, más allá de los satélites espías.
Si un satéite espía cayera en la reserva natural del Parque Yasuní, sería Dios.
Dios es Eterno e infalible, pero a nosotros nos créo pensativamente falibles
(quizás, hasta en lo que creemos infalible, i.e., la propia infabilidad de Dios).
A Descartes le dió vergüenza postular que Dios nos pudiera crear con tan falible capacidad. Por eso, se limitó a llamarle "genio", cuando le tachó de maligno.
Si pienso, no existo luego: existo solo. Lo demás podrá o no podrá ser (si no, que cuando sueño me convenzan de que estoy soñando.
El soñador que sueña que sueña es lo que el tomismo a las causas intermedias, o el tiempo como dimensión a Minkowsky.
El tiempo se puede plegar, igual que el espacio, y acortarse manteniendo su longitud...

(aunque los días de vida de las moscas son tan vida como los siglos de Niemeyer)

Y al final vivimos tanto como la mosca de la fruta -una vida que para ambas especies es infinita-,
Y sabemos tanto sobre Dios como los peces que ahora están flotando dentro del Kursk sobre la reacción nuclear.

(Para Pepe Palacio)

martes, 7 de octubre de 2014

Leaves of grass: increasing leaves, not much "grass"

Thanks, Mr. Whitman. Keep singing body electrics and mourning dead captains' hailed corpses

domingo, 5 de octubre de 2014

Olé

Les va a hacer publicidad su puta madre

martes, 30 de septiembre de 2014

¿Qué fue de Anónimoversatil?

Echo la vista atrás y recuerdo una presencia que nunca llegué a descubrir. Quizás, como en V de vendetta, sea mejor enterrar al hombre con la máscara que le convirtió en él mismo, pero su súbita desaparición solo me lleva a tres motivos posibles: A) el hastío; B) el enfadado desencanto con algo que escribí, o C) que ya no esté entre nosotros, en cuyo caso creo que se quien es -aunque eso solo me lo podría confirmar su compañera, amiga mía-.

¿sigues por ahí? en todo caso, un agradecido abrazo, estés donde estés

D (L).

El hombre que se perdió dentro de sí

Érase una vez un hombre tan ensimismado que se perdió en sí mismo, y nunca volvió a aparecer.

No fue cuestión de un momento: ni siquiera de días o meses. Era una gota a cada poco, un alejamiento paulatino de la realidad que le circundaba. Una actividad incesante, consistente en extirpar con cada respiro alguna de las cosas que le rodeaban. Una vez era un semáforo; otra, el perro del vecino y otra, la conciencia de que existía un país llamado Birmania. Y así, poco a poco pero sin pausa, su entorno se quedó en blanco, un vacío en el que solo flotaba él.

Después, como ya no necesitaba de habilidades sociales, fue dejando de hablar, de gesticular: de mostrar sorpresa, enfado o agrado. Por la sencilla razón de que no había nadie con quien mostrarlos. y como tampoco había donde ir, a quien abrazar o hacia dónde mirar, se le fueron secando la sangre de los miembros, la saliva de la boca y el humor de los ojos, hasta que se quedó flotando fijo en un solo lugar: respirando, poquito mas.

De esto modo lo único que quedó un caparazón pensante, en una nada autoimpuesta y, por ello, más irremisible que aquella que a veces nos imponen. Y como solo se tenía a sí mismo, se dio cuenta de que él era alguien a quien tampoco podía tolerar: sus propios pensamientos parecían los de otro que, objetivado de él, le imprecaba lo que había hecho. Que si ya no podría ver mundo, reír con los demás, llorar con una película de las de antes, oler la hierba recién mojada o probar la tibieza del pan recién traído.

Así que, ni corto ni perezoso, se desembarazó de su propia conciencia, y dejó de ser.

Y cuando fue nada, se dio cuenta de que la nada en que se había integrado era eterna, inmensa.

- Llena de sí misma-.

Fue en ese preciso momento que se dio cuenta de la trampa.

Pero para entonces era demasiado tarde, y se hizo uno con el vacío que llena todo el universo.

lunes, 29 de septiembre de 2014

The Twilight Zone

The twilight zone es a la Ciencia-ficción lo que las 1.001 noches a la literatura, que una vez leídas, pocas ideas verdaderamente originales se pueden ya encontrar. Parafraseando al gran D'Ors, lo que no es tradición, es plagio. Pues bien, la tradición, en el campo de la Sci-Fi y los finales inesperados, es la twilight zone - la clásica, la de glorioso blanco y negro, ojo-. Si a ello añadimos el placer de ver los primeros pasos en las ondas de Robert Redford haciendo de amable muerte (bien inspirado, Sr. Gaiman), Robert Duvall como cuarentón a quien su mamá prepara el cacao y mete en la camita (sorry, Wolowitz), Lee Marvin y Lee Van Cleef como vaqueros chulescos (toma spaghetti westerns o ciudades sin nombre, o Dennis Hopper haciendo de Nazi, la experiencia ya se torna mística.

Y tras ver episodios como the Passersby, a short drink from a certain mountain, living doll o tantos otros, el encanto del Sexto Sentido, Benjamin Button o Chucky cuando menos se matiza, diluyendose en la niebla de lo ya visto.

Vean los 156 episodios, pocos de ellos con desperdicio, y comprobarán la triste certeza de las páginas de D'Ors

L.

(Adelantándome al Sr. Atanes: el Dr. Who, otro hito)

jueves, 18 de septiembre de 2014

La sabiduría de la gente de la calle (en el día del referendum de Escocia)


"Mi corazón me dice que me gustaría que Escocia fuera independiente. Pero la cabeza me dice que hay muchas incógnitas, muchas preguntas sin respuesta, muchos sinsentidos. Por eso voy a votar no”.

Palabras estas que el periódico "El Pais" de hoy atribuye a un tal Bill Cumming, militante laborista del barrio obrero de Leith (norte de Edimburgo). Creo que nadie podría definir mejor el dilema entre corazón y cabeza, pasión y reflexión, que hoy atenaza a los miles que tienen en sus manos inclinar el resultado a favor del sí o del no. La cuestión, pretendidamente esencial, del petroleo; la permanencia en la libra o en la UE; los condicionamientos geoestratégicos o las nuevas alianzas no son objeto de estudio académico por el votante de la calle -el más esencial en este referendum-.

Al final es la intuición y la ponderación entre la aspiración ideal al medio/largo plazo y las consecuencias al corto/medio.

Interesante día, el día de hoy

viernes, 12 de septiembre de 2014

Madrid no puede seguir así

Podrido en sus ramas, podrido en la suciedad de cada una de sus calles, y podrido por dentro: a los pobres turistas que tengo a mi lado les acaban de robar la cartera.

Esto no puede seguir así.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Todos somos esclavos de, al menos, una belleza


LoL

I fear nothing,
Because nothing is what I am.

I fear dancing,
Because I never saw but ghost dances around.

I fear wailing,
lest become proudly mad.

I fear beauty,
For fear of ending ever sad.

I fear you, my love,
for your love I cannot return.

I fear loneliness
For alone I can not stand.

I am selfish
Raw
Scorpion's sting
Spoiled marrow
Your reflection in the mirror.

Look at me,
look at you.

And smile,
cry
or break the mirror,

and try to cut us both with a shard,

Because I will survive,
And you will also become mad.

(LOL)

Quizás quede tiempo

La cadente pero despiadada prisa
de quien al fin sabe que nunca fue dueño de su vida.
El aumento en el ritmo de los latidos
de quien se sabe engañado por el tiempo.
Evidentes surcos de arrugas al otro lado del espejo,
cuya concreta autoría desconocemos.

Relojes que nunca marcharán hacia atrás

Pero

Ese tiempo que nos queda
y al fin reconocemos,
Agua de clépsidras con mecanismo de autodestrucción,
Cuyas gotas caen al ritmo de una polonnaise histérica,
hija bastarda de un Chopin rendido al frenesí del tiempo que se acaba,

puede llenarse de tiempo:
tiempo dentro de tiempo,
pequeñas vidas al día, almacenadas en una memoria forzada,
como la Maga, doblada como el joven de Rocamadour
como la maleta de la Muerte, el gran juguetero
donde siempre cabe uno,
-algo más-.

Despierta y no duermas,
No porque ya dormirás cuando mueras,
sino porque,

quizás,

hace tiempo que te descerrajaste el tiro en el alma,
y ya estás muerto.



(No tomes tiempo para llorarte,
llora por no haberte vivido)

sábado, 30 de agosto de 2014

A raíz de la película Intocable

Bella

Punto

Y qué más da si exagera tópicos para llegarnos dentro. Al final, no somos sino tópicos, masa elemental que forzamos según qué instinto necesitemos satisfacer: hambre, sueño, supervivencia... reproduccion.

Exageramos sensibilidad, currículum, apetitos, agotamiento. Y solo cuando estamos verdaderamente satisfechos nos vemos como realmente somos: moles aeróbicas que, como cualquier otro animal, ronronean recien terminado según qué placer, incapaces de hacer cosa alguna.

Tetrapléjicos del alma.

jueves, 28 de agosto de 2014

Canciones con las que irse

La mer (Charles Trenet)
As time goes by (Dooley Wilson)
Cheek to cheek (Fred Astaire)
It's a wonderful world (Armstrong)
We're off to see the wizard (Garland, Bolger& Ebsen)
polonaise (Chopin)
Viena (Ultravox)
The one I love (REM)
Rien de rien (Edith Piaf)
Visi d'arte (Tosca)

Tarea, funcion y fin

Toda tarea que se impone a alguien debe servir para una funcion, que a su vez ha de estar dirigida a un fin: a un buen fin.
Y si cualquiera de estos postulados falta, la nocion de deber desaparece, para ser sustituida por el derecho a decidir del destinatario ultimo. Siempre, claro está, que cada uno de estos tres elementos supere un test de objetividad, preciso para depurar todo subjetivismo, ideología o intención espurea.

miércoles, 6 de agosto de 2014

La sabiduria del afillao

-Y ahora, ¿donde vamos?-, le pregunté a mi ahijado, ambos en el patio tras anunciar que nos ibamo de casa.

El, con la sabiduría de sus 10 años y el sueño de casi la medianoche, me respondió -donde nos lleve la vida-.

Nos acercamos al portal de salida, nos miramos y le pregunté mi mas casual ¿y ahora qué?

- Ahora, volvemos para arriba-, replicó con el mismo tono de lo evidente.

Subimos y ahí nos quedamos.

Como siempre

martes, 5 de agosto de 2014

viernes, 1 de agosto de 2014

Penelope Cruz, la consecuente

En un día pasa de condenar la carnicería que están sufriendo los gazatíes a decir que la culpa es de las dos partes...

La magia de Hollywood es así

lunes, 9 de junio de 2014

El capitán de las ruinas


Erase una vez una casa especial,
donde lo que mas había era gente que nunca había vivido en casas.

Y por eso, no sabían para qué servían
los interruptores que hacen nacer la luz,
los pomos que abren las puertas
o,
sobre todo,
los electrodomésticos donde se mezcla lo que luego alimentará a muchos.

E iban aprendiendo
-los que aprendían-
a base de intentos, resultados y fallos.

Y por eso la casa se caía 
porque eso es lo que era, una casa:
 no un garaje, un laboratorio o una fabrica de objetos imposibles 
-como los que nunca habían vivido en casas pretendían-.

Y la casa dejo de servir como casa,

y acabó cayéndose.

Solo una persona se salvó:
alguien que fue expulsado, por no estar a la altura de los que nunca vivieron en casas.

Este se salvó,

y ahora pasea por las ruinas de la casa,
y se pregunta si hizo lo correcto 

O

como los capitanes,
hubiera debido seguir dentro,
contra viento, marea y supervivencia,
y morir con ella.

Ahora mira los escombros

y llora

Porque la casa era necesaria para que todo lo que la rodeaba pudiera vivir,

Y el desterrado fuerza los ojos para encontrar una flor,

vida,

y seguirá yendo a las ruinas hasta que la encuentre

O,

como los capitanes de los buques para siempre varados,

su cuerpo al morir se haga humus

donde pueda germinar la semilla que la providencia transporte.

Just words

We are the stuff dreams dream on,
we are undreamt dreams,
waiting to be dreamt
 -and thus, quickly forgotten-
by a little waking stone,
 in the midst of what remains of a lost sea.
We are the unshed tears of widows to be,
fictional fears for unexisting,
unsung,
losses.

Coins shed into a bottomless well
while the authors of our fall will remain
-for eternities-
waiting for the sound 
of an impact 
which will never come.

We are the sad moments of the Cheshire cat,
the sober thoughts of Leopold Bloom,
Odysseus lost compass,
bombs full of roses, waiting to fall on phantom cities.

We are images
-poweful or not-,
voices
-eversounding or silent-,
dreams of dreams
-awaken or dead-,
that uncomprehended beauty which makes us cry,
the unsung question,
the drums beaten on ragged human skin by the stumps of the unborn,
the rage of the innocent condemned to never be born
-and nevertheless, bearing eternal witness to the decadence of this race-.

Poisonous balm,
sweet tears edulcorating the primal milk,
tame Leviathans
.
..
...

(Just words, never to be read)

martes, 13 de mayo de 2014

The Zero theorem, by Terry Gilliam


Inaugura el NOCTURNA 2014, este 26 de mayo, la nueva paranoia del director de Tideland. Estética tipo Brazil, guión demasiado parecido a la enésima vuelta de tuerca a 1984, y actorazos (esta vez Christopher Waltz). Veremos que toca ahora: a) obra maestra incomprendida, o b) peliculeja que le de cuartos para autofinanciarse una de las precitadas. 
Con este señor nunca se sabe, por lo que este que está aquí, como siempre, lo comprobará in situ

El Derecho al olvido

Hoy, mi Santa Casa ha reconocido la existencia del derecho al olvido, obligando a google a arrostrar las consecuencias de no respetar la decisión de aquellos ciudadanos, cada vez más pocos, que quieren permanecer anónimos en la red de redes.

Hace miles de años, el olvido era una condena. Hoy, una bendición.

martes, 6 de mayo de 2014

El último regalo de Julio


Tras una condena de 25 años encadenado a una silla de ruedas por una operación que salió mal, el cuerpo de Julio finalmente se hartó, y dejó esta madrugada que su alma pudiera irse y volar. O salir corriendo. O gritar, pegar patadas, bañarse en la piscina de Villaviciosa, hacer aeróbicos en la cyclostatic de G.A.C.... Cualquier cosa ya, menos seguir encerrado -como la maripoosa en la escafandra de Schnabel- en un cuerpo que apenas podía respirar, atragantado por unas flemas que no podía ya ni expulsar.

Cuidó de mi hermano y de mí cuando murió el abuelo y éramos unos micos. Me salvó del suspenso en latín haciéndome repetir cien veces cada declinación -el jodido-, y me hizo descubrir el album de Yoplait del Doctor Gadget en su pueblo de Toledo. Fue mi amigo, y ambos estábamos orgullosos.

Hay cosas que el alma intuye.

Hace justo dos semanas fuimos a ver lo que quedaba de él, en la seguridad de que ya no estaría. Paquita nos había avisado que vegetaba, y que ni lo levantarían a causa de unas heridas debidas al enésimo ingreso de urgencia por el enésimo fallo en el enésimo órgano que tenía destrozado. Y ahí estaba: no postrado -porque es la vida la que te postra, no la enfermedad- sino harto, sin ser siquiera consciente ya de lo cansado que estaba.

Pero el tío reaccionó a las voces, y abrió los ojos. Nos reconoció, nos llamó por nuestro nombre y el puñetero, con dos cojones, obligó a su mente a despertarse y guardarnos como uno de sus últimos recuerdos. Ese día Julio luchó -como los gladiadores que tanto admiraba- para que su mente se despertara, sí o sí: habló con nosotros, dejó claro que nos reconocía e hizo como los políticos, dirigiéndose a cada uno de nosotros comentando alguna característica, algo que diferenciara cada una de nuestras relaciones con él. Algo que hiciera que cada uno de nosotros se sintiese único y especial, responsable de haber obrado un pequeño milagro. Cuando el milagro lo obró él forzando a su mente, haciéndola daño hasta que ésta tuvo que ceder y despertarse para estar de vuelta con gente que quería. Y cada vez que movía la cabeza para clavar su mirada en cada uno de nosotros y regalarnos una frase, ese cuerpo cabrón se obstinaba en hacerle pagar tamaño atrevimiento, y se podía ver la agonía. Pero Julio venció, y se salió con la suya, una vez más, por sus amigos.

Me han contado que su mente luego se vengó, y se cerró obstinadamente hasta que Julio dejó de estar. Tengo que hablar con los míos para que me cuenten la verdad -o la mentira- de que se fue tranquilo y no lo notó. En todo caso, seguro que donde esté habrá tirado ya la silla de ruedas, se habrá incorporado y, con su chandal claro calado hasta el ombligo, ha vuelto a Villaviciosa a ponerse en forma en la cyclostatic y hacer sus aeróbicos mientras Esther, Foncho, José y yo, micos de nuevo, comemos en bañador las croquetas industriales y el yogur de chocolate de la casita de Danone, tras una sesión de piscina -con flotador, eso sí, nunca se está lo suficientemente seguro-. Han sido muchos años sin hacer ejercicio, y le espera una eternidad en que parará poco.

Recuerdo cada palabra que dijo hace dos semanas. Pero eso es patrimonio mío, y estoy seguro de que me ayudará cuando más necesite recordar que al menos, alguna cosa hice bien.

Descansa, Julio: si no lo mereces tú, no lo merece nadie, y esa es la mejor laudatio.

Vale atque ave, amicus meus.

Tu amigo que te quiere,

Luis

viernes, 28 de marzo de 2014

Parque de Merl

Contemplo la pausada puesta de sol desde el parque de Merl,
mientras las flores de los almendros vigilan que los niños no se pierdan
- E intentan que sus padres se reencuentren-.

En el parque de Merl quedan todavia bancos vaciados de parejas,
faltos de uno que antes eran dos,
pero no ha perdido la esperanza:
ha vestido sus mejores galas y,

como una flor,

tiende con sus colores la trampa para que quienes se perdieron se reencuentren,

y la esperanza sea el polen que se pegue en nosotros,

-que al final solo somos insectos de diamante no comprimido-

Y la esparzamos, allá donde acabemos.

Y fecundemos un mundo que hace mucho la perdió.
Y las tiendas e Chanel se llenen de flores gratis

Y todo deje de costar:
para volver a valer.

jueves, 27 de marzo de 2014

Diverxo/clonetrooper

Porque se lo pueden permitir: si esto no es mirar por el cliente...

miércoles, 26 de marzo de 2014

viernes, 21 de marzo de 2014

Surrealistic Luxembourg (o de cómo acabe disintiendo con cuatro agentes sobre la frontera entre responsabilidad civil y criminal)

- Vuelo Madrid-Luxemburgo LG3831 día 21 de marzo a las 17:15
- Adquirido el 20 de diciembre (usease, hace mas de 3 meses)
- ayer, el menda, con el culo pegado al PC justo a las 17:15, para hacer el Web-checking... y resulta que no me deja
- Hoy llego aqui con 2 horas de antelacion (sí, cosa rara) y me dicen que... hay overbooking, que vaya al "superviseurdelacompagnie", quien resulta ser un berbe mozuelo ha poco destetado.
- El zagal me cuenta que el vuelo ya estaba "preparado" (completo, en no se que lengua) antes de que se abriera el plazo de 24 horas del webcheckin
- A mi pregunta "donde tengo que meterme para que me 'preparen' también a mi antes de las 24 horas" me dice " c'est pas possible, monsieur" (verdes las han segao, campeon).
- Tras mucho varear al mozuelo, me logran colocar en uno via Frankfurt que llega a medianoche, que la cosa es legal y que a veces los vuelos ya estan "preparados" días antes. Que si no me gusta... que proteste, que eso pasa porque el billete era "de los baratos", aunque ese pequeño detalle no lo pudiera la promocion.
- Asqueado por el conjunto de circunstancias (y por haber sido tratado como Julia Roberts en la tienda de Beverly Hills de pretty woman)vintento plantear una denuncia. El poli me mira cual entomologo a cucaracha vulgaris y me dice que "ahora llega la patrulla".
- A los 5 minutos me llegan cinco sujetos uniformados y me preguntan que pasa, tras lo cual se miran, intercambian ruidos y palabras en luxemburgues y me dicen que eso es civil: lo que faltaba,
- ante lo cual intento explicarles, en frances y aleman, que considero que el reproche penal es suficiente como para poder integrar un ilicito penal y que es en todo caso el juez quien sobresee o acuerda la prosecucion penal...
- ellos que verdes las han segao, que eso es civil
- Yo, que respeto su parecer, pero que me tomen la denuncia...
... y de repente...

La temida mirada de "me estas empezando a dilatar las gonadas, machote", pero multiplicada por cinco

A lo que mi yo atávico, acostumbrado a las relaciones de poder y poco amigo de recibir ostias como panes en sonsorron 4+subwoofer optó por la retirada estratégica

Cuando se me pase el cabreo, redacto la denuncia y lo intento otra vez, pero en otro sitio mejor...

Vida y olor

Cuanto hay que moverse para parar
Cuanto hay que volar para tocar la tierra
Cuanto hay que gritar
hasta poder guardar silencio.
Las voces que mas oimos fueron las mas quedas
Los castillos que perviven estan hechos de nubes, cielo y sol
Las unicas prisiones que nos encierran las llevamos con nosotros
- en cada respiro-
El Dios en que todos creemos en realidad, no tiene nombre,
y nuestro mayor crítico debieramos ser nosotros.
Deberiamos bailar en cada sueño
Llorar por ver salir el sol,
escupir a quienes nos seducen
y escuchar a quien llora al reprendernos
Pero nunca es así.

Porque olemos a hierro recien llovido
A herrumbre de siglos
A corrupcion tan vieja que ya apenas huele.

Y debieramos oler a leche de madre,
a verde de tallo cortado con cuidado para regalarlo a alguien
a mar,
a madera de desván,
a madreselva y dama de noche,
a cinturon blanco infantil de Yudo
a preguntas,

Menos a nosotros, y mas a ellos

martes, 11 de marzo de 2014

Hace ya 10 años

Pasó algo horrible en Madrid. Unos fanáticos volaron las vidas de 192 seres humanos, los sueños de otros 2.084 y la confianza de todo un país.

Ni Allah, ni Dios, Buda o restantes seres superiores quieren cosas así, y tampoco es el Diablo quien empuja a hacerlas.

En días así Dios no existe, y el Diablo somos nosotros.

lunes, 10 de marzo de 2014

la literatura alemana del siglo veinte. Opiniones de un payaso -de Böll y del payaso-

A los alemanes les encanta plasmar lo que piensan: que se sepa, vamos. Único problema, que cuando plasmas lo que piensas, la gente lo ve: lo que piensas, y también cómo piensas, los procesos de reflexión y plasmación. La literatura alemana del siglo XX es, ante todo, alemana: ahí dejaremos esa cuestión, pues nos arrastraría a la pugna entre el genio del ingenio meridional versus el ingenio del genio septentrional, y ahí no puedo caer. No ahora. Así que volvamos a lo nuestro.
Mann, Grass, Böll y tantos... ¿son literatos que hacen crónica de sus creaciones, o rigurosos cronistas líricos que tornan su imaginación en crónica? Leo la montaña mágica, el tambor de hojalata, las opiniones de un payaso y, cierto, se basan en personajes que no han existido estricto sensu, pero el corsé a que son ajustados se torna en una sucesión de reflexiones internas que son vertidas casi directamente al papel. El escritor alemán parece el juez de Montesquieu: una suerte de autómata condenado a transcribir cuasi-mecánicamente los pensamientos de su obra. Un Tyrell que pudiera leer cada reflexión de sus Nexus-VI, condenado a no hacer otra cosa que copiarlas so pena de perder el hilo de las mismas. Esa es la impresión que me da la literatura alemana del siglo XX. No es que sea o deje de ser un coñazo lineal, pues eso mismo se podría imputar a Proust y, por contra nadie lo hace. Tampoco es orfebrería o relojería de precisión aplicada al modo de usar la pluma. Ni manierismo. Es otra cosa derivada de la aplicación de los mecanismo del pensamientos científico-filosófico al proceso literario de creación. Un eterno norte contra sur que se libra en el norte de nortes sin que el sur acabe por desaparecer. Una pugna en que la espontaneidad se rebela contra mecanismos demasiado teóricos de creación... la crónica de una muerte anunciada pero imposible de consumar.
Leo las opiniones del payaso de Böll y, como tantos otros, recuerdo la sucesión risa-llanto del Pagliacci, la clamorosa fuerza de la pasión que no se entiende a ella misma, y lo comparo con la racional secuencia de estrictas reflexiones internas de Hans Schien sobre cómo dar el sablazo a sus colegas. Detecto -y admito- diamantes fácilmente detectables en el texto (v.g. "los momentos hay que dejarlos y no repetirlos jamás") y pienso en probabilidades, milagros termodinámicos, cierres y cadenas, como si me imaginara un gabinete sadomaso en pleno Marte...

Pero no es así

viernes, 7 de marzo de 2014

El anciano miró hacia atrás

El anciano miró hacia atrás.  

Y aunque vio cosas que no había hecho como debiera, vio también su tiempo reflejado en las gotas de lluvia que este, su ultimo día, serían sus compañeras. Miró a través de ellas y, como a través de un prisma, su vida dejo de ser gris para hacerse los colores del arco iris.

Los colores de los brazos de sus padres al abrazarle, de la sonrisa de sus hijos. El verde del huerto donde aprendió a caminar, el azul del mar que tuvo que atravesar para poder sobrevivir, y el rojo de la sangre que derramó por su país. 

Y lloró. Y sus lágrimas se mezclaron con las gotas de lluvia,

y sus ojos devinieron el prisma que transformaba la luz en color.

Y murió envuelto en su propio arco iris

jueves, 6 de marzo de 2014

Ilustradores olvidados, autores olvidados. Tiempo a borrar

La segunda mitad del siglo XX español parece, cuando menos, incómoda: a nivel político, a nivel social, a nivel territorial... y parece que ha sido condenada ad oblitum, como un Diocleciano cualquiera. Lo malo es que, como las antiguas condenas romanas, la destrucción de cada busto del apestado en cuestión conllevaba la muerte de una obra de arte única y su desaparición sine die del tiempo. En el caso a examen, el empeño por borrar 50 años de historia política de un plumazo está llevando al progresivo debilitamiento del recuerdo del arte de entonces.

Hay toda una generación de artistas en peligro de extinción: aquellos publicados por Aguilar, Destino o incluso Bruguera, que están desapareciendo iremediablemente. El recuerdo de Martín Recuerda, Lauro Olmo, Tomás Salvador, Barbeito, Lorenzo Goñi, Celedonio Perellón y tantos otros va desapareciendo de la memoria común, involuntariamente asociado a la época en que vivieron.

Acabo de rescatar una serie de grabados eróticos de una adaptación del sutil Gamiani que Perellón ilustró allá por el año de nuestra Constitución: 12 grabados nada sutiles, pero tampoco incursos en la tentadora aberracion qe parece haber infectado a los artistas de ahora. Y señores, despues de haberlos degustado, solo cabe decir que qué pena da vernos a todos con la venda en los ojos



martes, 4 de marzo de 2014

Tiempo

El unico momento en que somos conscientes de la eternidad, es aquel en nos damos cuenta de que ya no volveremos a ver a alguien que se acaba de ir. Solo entonces percibimos lo lejos que está el nunca, lo cruel que puede ser el tiempo cuando resulta incapaz de ayudarnos, y lo gigante de cada letra de la palabra soledad.

Pasamos la vida día a día porque alguien eligió ese periodo de tiempo, cuando la vida no la contamos en porciones de reloj, sino en lo que ocurre entre cada recuerdo de lo bello que vino, y cada anticipacion de lo bello por venir.

Y es en ese espaciotiempo entre reinos, indefinible en extension, donde acontece el presente: cada hoy que fue ayer antes de mañana.

No se vive el hoy. Se vive el siempre: que nos vio nacer, y que nos mostrará la salida.

The sweet giant beauty of most little things...

viernes, 28 de febrero de 2014

El tiempo, que a todos vence

Aquí se casó Francisco José hace... ¿10 años? Recuerdo ese suelo, esos azulejos y esos cristalitos de espejo estilo bola de discoteca setentara...
El puto tiempo, que no hay quien pueda con él.

El sencillo amor que no precisa de mas

"Are we tough enough for ordinary love" es una frase del ultimo corte de U2. Si prescindimos de las forzadas alusiones a Mandela del clip y nos centramos en escuchar la letra, encontramos un puñado desperdigado de serias verdades, una de las cuales encabeza estas lineas.

Hay que tenerlos muy cuadrados para aceptar querer y ser queridos sin más: sin escandalos, sin discusiones surgidas para sentir algo. Sin amantes, aventuras o guiños. Sin putadas, medias verdades o reproches.... Sin tener que torcer la realidad o los caminos rectos como unica vía de sentir.

No hace falta, de verdad. No hay que tensar la cuerda del sencillo y gran amor para volver a sentir. No hay que jugar con fuego...

Porque, al final, la cuerda se rompe, y se rompe de verdad

martes, 25 de febrero de 2014

El sueño de la razon

Hace tiempo me comí un poco el mundo (solo un mordisquín). Ahora duermo la siesta para digerir esa comida, y contemplo los sueños que la digestion me produce.
Algunos son buenos. Otros, producto del empacho. Los que vienen del desahogo de la razon que grita...

lunes, 17 de febrero de 2014

Frase mítica

"Pues mira, tienes dos manitas y la tricotosa" (uséase, yo ya no te mantengo más)

E. dixit

lunes, 13 de enero de 2014

... Y ahora, con neblina

Ayer a las 18:00. Avenue Marie- Thérèse, casi con bvd. Royal. El centro, vamos...

(Me estoy concentrando como nunca. Y el alcohol, ni probarlo. Esto sano es un rato)...

lunes, 6 de enero de 2014

Delegación regia ("regia delegatio")

Fenómeno cuasi-administrativo mediante el cual SS.MM los Reyes Magos delegan en alguien la confeccion de un regalo tan exclusivo que solo puede ser encargado a esa persona. P.Ej: un dibujo de la vista que tenemos desde casa (carta de un niño temporalmente desplazado fuera de su país)

Felices Reyes