Además del descubrimiento de la terraza del sexto, y de la posibilidad de colarse usando su ascensor de acceso (decir al pedazo cuatro por cuatro de la puerta que vais al "Restó"); además de las tentaciones de la tienda y de las estudiantes que usan la biblioteca, el Pompidou tiene el mejor museo de Arte Moderno del mundo -sorry MOMA, sorry Tate, sorry Sofi-. Típicos tópicos supercool nivel 1: Joseph Beuys y su Plight -oda al silencio en forma de galería acolchada, Sala 15-, Cy Twombly, Jordi Colomer y los clásicos Bacon, Pollok, De Kooning o Calder. Inmortales Gris, Laurens, Duchamp, Magritte o Braque. Mis preferidos (además de Freud): Balthus, Picabia (que, lo siento por los galos, era Martínez Picabia: padre español) y el jardín de invierno de Dubuffet. La temporal de Louise Bourgeois me demostró que todos tenemos un jardín secreto, aunque no lo reguemos (donde tanto Bourgeois como Dubuffet crearon, moldearon o descrearon), y la existencia de seres que perviven en nosotros y a los que adoramos, por mucho que les odiemos.
1 comentario:
Ya que estamos con los museos del mundo, decirte que no has incluido uno de mis cuadros favoriros del Pompidou, uno de Richter.
Pero lo puedes remediar colgando uno mío o yendo a ver mi la expo que tengo ahora en "Proyecto Arte", una galería que está en Fucar 12.
Un abrazo
Publicar un comentario