lunes, 25 de abril de 2011

el Poker de voces de Ignasi Vidal




Hoy a las 21:00, en el Calderón -actual Haagen Dazs, pena de crisis-, visito a Ignasi Vidal en su nuevo proyecto, Póker de voces. Me encantaría glosar la obra como se merece, pero Ignasi me dijo que iba a ser un sorpresón de calidad, y si lo dice un pedazo de profesional como él, prefiero dejarme sorprender.

Ignasi Vidal es de esos profesionales que hasta que no te lo presentan, no te das cuenta de lo cerca que ha estado de tí a lo largo de los años. Recuerdo, cuando fui a ver Spamalot, que me partí con el rubio de la melena que pasaba de obrero anarquista a caballero guapetón, y era Ignasi. Recuerdo al Judas del más reciente Jesucristo Superstar, y resulta que era Ignasi. Y si ya llegamos al Javert de los miserables de Gran Vía, indudablemente uno de los mejores malos de que he podido disfrutar nunca, resultó también que era Ignasi.

A Ignasi me lo presentó Atanes (que también estrena este jueves, mire Ud.), y es otro favor que le debo. Porque es muy difícil que la gente buena -profesional y humanamente- no sea a la vez sencilla, inteligente y cercana. Tan cercana que acabamos un día en casa a las tantas tomando maruca y partiéndonos con los cortos de Segundo de Chomón. Y como la cosa iba bien repetimos, y acabamos hablando de las virtudes de Mario Casas ex nunc. Hoy tripito. Se que disfrutaré, y se que le felicitare por un nuevo trabajo hecho con cariño, dedicación y constancia, uséase, un trabajo bien hecho. Las líneas maestras de Poker de voces os las dejo aquí , y repiten el 23 de mayo. Para echar un ojo al blog de Ignasi, también estupendo, pinchad aquí.

Un abrazo, Ignasi. La vida a veces da sorpresas buenas: tú eres una de esas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Impresionante! Imposible no quedar fascinado viendo a cuatro grandes artistas disfrutando encima de un escenario