miércoles, 1 de septiembre de 2010

El cine chino


Aunque iba a colgarlo más tarde, el reciente comentario de mi querido e inefable anónimo sobre Aftershock me sirve para colgar esta fotillo y compartir una reflexión sobre el cine chino: China ha comprado -y pagado en líquido, como explicaré proximamente- principalmente tres cosas: el progreso, el capitalismo y la transición. Pero también ha comprado otras muchas, entre las que se encuentra, quizás como una evlución del progreso, la manera actual de hacer cine de consumo. Un buen ejemplo es goLalago y las macropelículas históricas, pero también se pueden encontrar películas que logran un satisfactorio término medio entre la épica maoista, el relato de acción y catástrofes y los sentimientos. Aftershock es el vivo ejemplo. Creo que el poster le hace una desafortunada publicidad, pues más bien parece una superproducción tipo 2011 que lo que verdaderamente es, y por eso precisé los sabios consejos de Rosa, la surcoreana, para decidirme a verla. Y valió la pena, máxime hoy que, tras ver el acertado comentario de Anónimo, compruebo que coincidimos en una cosas más. Por ello, salve y un abrazo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sin creerme mejor en rango que cualquiera de sus lectores ( si quizá poco más irónico) le doy las gracias por el honor concedido. Gracias.

P.S: Le seguiré leyendo, si el bochornazo madrileño y la consecuente cerveza que pienso ingerir me permite seguir... ay! y pensar que el 1 de septiembre todos nos proponemos erradicar y cambiar hábitos...empiezo bien, a día unooooo! madre mía!